Su producción está directamente relacionada con la estacionalidad, el entorno de sus plantas y los imprevistos climáticos. Aunque se conozcan las estaciones con antelación, es importante prever una protección climática..
El entorno se puede crear artificialmente, pero la gestión del clima sigue siendo difícil.
En efecto, la exposición prolongada de sus plantas:
-Al sol: quema las hojas, crea golpes de sol, y por ende fruta de mala calidad,
-Al viento: seca las hojas, crea fricciones que alteran sus producciones,
-A una fuerte lluvia: daña las hojas y la fruta,
-A una higrometría demasiado importante: favorece el desarrollo de enfermedades y de moho,
-Al granizo: daña o destruye la producción presente, pero también hiere ramas, yemas, tronco y provoca una reducción de la productividad.
Una protección climática para resguardar sus cosechas de los imprevistos climáticos
Le ofrecemos una gama completa de redes para enfrentarse mejor a estos casos y dar a sus cultivos un clima óptimo para una productividad máxima. Esta protección también le permite reducir los costes de los tratamientos y de irrigación.
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