Tanto la ventilación como la refrigeración en las granjas, son necesarias para mantener en condiciones óptimas a los animales. Una mala ventilación puede provocar la acumulación de gases tóxicos, y una refrigeración deficiente hará que la temperatura aumente a niveles perjudiciales para los animales.
Refrigeración de establos para ganado
Lo primero que se debe conocer es la diferencia entre ventilar y refrigerar, ya que mucha gente piensa que es lo mismo. Son conceptos parecidos pero distintos, por lo que tener clara la diferencia a la hora de montar una granja es muy importante.
Ventilar consiste en renovar el aire de una estancia por aire nuevo, de esta manera se evitan las grandes concentraciones de gases nocivos. En cambio, refrigerar consiste en disminuir la temperatura del aire de una estancia, esto se debe hacer cuando se supere la temperatura crítica. La temperatura crítica se determinará según el tipo de animal que se quiera criar.
Para conseguir un ambiente adecuado en una explotación ganadera, se deben de tener en cuenta una serie de parámetros:
-Temperatura: Es muy importante controlar la temperatura ambiente de una explotación ganadera. Demasiado frío repercutirá en un aumento en el consumo de alimentos de los animales, mientras que demasiado calor se traducirá en una menor producción de carne.
-Humedad relativa del aire: Este parámetro determina la humedad que existe en el ambiente. Su valor debe de estar comprendido entre un 60% y un 80% de humedad en el aire. En caso de tener una humedad superior al 80% puede ser perjudicial para los animales.