La sonda OxyGuard es una célula galvánica cubierta por una membrana que genera una señal eléctrica proporcional a la presión de oxígeno que detecta, sin importar en qué medio se encuentre.
La sonda puede medir concentraciones muy pequeñas de oxígeno en gases inertes o explosivos, así como el contenido de oxígeno del aire ambiente y la pureza del gas oxígeno.
La versión EX está cubierta por una cubierta de acero inoxidable, de modo que el área total no conductora es lo suficientemente pequeña para ser utilizada en áreas clasificadas EX. La sonda en sí misma es un "aparato simple" y como tal no necesita ninguna aprobación antes de poder ser utilizada en tales áreas. Se utiliza un amplificador de barrera o de aislamiento aprobado para conectar la sonda en el área EX al transmisor que se utiliza en el área segura.
La sonda también incluye un sensor de temperatura NTC para permitir mediciones precisas del volumen en % bajo temperaturas cambiantes.
Esta sonda tiene unos intervalos de calibración y mantenimiento excepcionalmente largos.
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