La aspersión o riego por aspersión es el método de riego tradicionalmente más conocido.
Como sugiere la propia palabra, este tipo de riego consiste en distribuir agua a través de un aspersor. La presión de funcionamiento crea una llovizna espesa que se deposita sobre el cultivo.
Hay sistemas de baja y alta presión.
Apto para cualquier tipo de cultivo.
El riego por aspersión se utiliza principalmente en terrenos llanos para evitar que se produzcan fenómenos de escorrentía excesiva en el suelo, y su mejor uso es en ausencia o reducida presencia de viento para evitar que la deriva del viento cree dispersión de agua.
Las ventajas de rociar
Descubre cuándo usarlo
APTO PARA TODO TIPO DE SUELO
Se diferencian en sistemas fijos que funcionan sin necesidad de mano de obra y pivotantes, y sistemas rangers que pueden trabajar a presión media (4-5 bar).
Los sistemas móviles tienen la ventaja de ser mucho más versátiles, como las máquinas de riego autopropulsadas (rotolone) que requieren mano de obra para su desplazamiento y trabajan a presiones más elevadas (6-8 bar).
MAYOR INTENSIDAD DE CAÍDA
Afecta a una mayor superficie de terreno y es imprescindible en suelos drenantes