El laboreo es una práctica fundamental en la agricultura para preparar el suelo aplicando una fuerza mecánica. Debido a la diversidad de condiciones, los aperos pueden ser poco homogéneos. Por ese motivo, ahí es donde entra en juego la labranza de precisión, que mejora el lecho de siembra para lograr una mejor germinación, una aplicación más precisa del control de la aparición de malas hierbas y una gestión más fácil de los residuos en superfi cie deseados. El control de profundidad de laboreo garantiza una ejecución uniforme y repetible, preparando el suelo según lo previsto.
La solución de control de profundidad de laboreo (Tillage Depth Control, TDC) Norac emplea una tecnología de sensores ultrasónicos sin contacto, de efi cacia probada en el campo, para ofrecer el control más preciso del mercado. Los sensores, equipados con algoritmos diseñados a medida, detectan y diferencian las obstrucciones para mantener la profundidad deseada. A diferencia de cualquier otra solución, esta está específi camente diseñada para compensar la diversidad de condiciones en el campo: campos de regadío, de secano o en terrazas. Con el control de profundidad de labranza (TDC), la profundidad ya no es un ajuste de confi guración especulativo, sino que se mide y controla con gran precisión. La interfaz ISO-UT permite confi gurar fácilmente las condiciones del suelo, las preferencias del operario y las paradas mecánicas que determinan la profundidad adecuada.