Aparta en la entrada las partículas de polvo finas y separa el producto bueno del fragmentado y de los desechos.
Es indispensable para la limpieza de los cereales que deben almacenarse por largos periodos (impide los sobrecalentamientos provocados por la presencia de cascabillo y producto pulverizado partido); una vez finalizado el tratamiento, el producto será más sano y de aspecto bueno.
Funcionamiento
El producto entra por gravedad en un distribuidor de rodillo motorizado y es distribuido uniformemente en toda su anchura; a continuación desciende formando un velo y recibe un flujo de aire transversal que aparta las partes más ligeras, (decantadas por un ciclón o un filtro) depositando una parte del polvo más pesado en la tolva de decantación provista de cóclea de expulsión de los desechos.
El producto, sin polvo, entra por gravedad en un tambor giratorio cilíndrico, recubierto con rejillas perforadas intercambiables. La primera rejilla elimina las impurezas finas (arenas, fragmentados, etc.) y las sucesivas permiten al producto bueno pasar a través de los agujeros predeterminados y las impurezas gruesas al final del tambor.
La elección de las rejillas se efectúa en función del producto y del tipo de desecho que se debe separar.